Todos
los cambios de capĂtulo, incluso de galaxia, suceden con un sombrero. O
quizá sea al revés. Si no es asà se trata sólo de un cortocircuito,
como mucho de un escalofrĂo, un leve olor a quemado. Antes de todo esto,
el 21 de diciembre habrá palomitas de maĂz: una CODA inesperada de mi
Ăşltimo concierto de presuntas canciones y sus ensayados comentarios
entre ellas hasta 2016 ó quizá 2017... Ya me dirá el sombrero. El show,
que será mejor que una comida de empresa navideña aunque menos satánica,
será este: lafonoteca